Lo que alguna vez fue solo el argumento de una película de ciencia ficción, podría estar más cerca de la realidad de lo que creemos.
El físico Melvin Vopson, investigador de la Universidad de Portsmouth, ha presentado nuevos avances que apoyan una de las teorías más provocadoras de nuestro tiempo: la hipótesis de la simulación. Según esta idea, el universo entero podría no ser más que una simulación computacional extremadamente avanzada.
En un artículo publicado en 2023, Vopson ofrece lo que él considera evidencia científica que respalda esta teoría. Su trabajo parte de un campo emergente conocido como física de la información, que postula que la base última del universo no es materia ni energía, sino información.
Es decir, que todo lo que vemos, tocamos y percibimos estaría compuesto por “bits” de información, como los datos que componen un videojuego o una película digital.
Un universo que se comporta como software
Vopson fue más allá de lo teórico. Propuso que la información no solo está presente en el universo, sino que tiene masa, lo que la convertiría en una entidad física medible. En investigaciones anteriores, sugirió incluso que la información podría ser la misteriosa materia oscura que constituye aproximadamente el 27% del universo.
Una de sus contribuciones más destacadas fue la formulación de la llamada segunda ley de la infodinámica en 2022, una extensión de la termodinámica clásica, pero aplicada a los sistemas de información. Según esta ley, el desorden (o entropía) dentro de un sistema aislado de información no aumenta —como ocurre con la materia—, sino que tiende a disminuir. Esto implica un comportamiento ordenado y no aleatorio, muy similar al de un sistema computacional que elimina datos innecesarios para optimizar su rendimiento.
«Fue entonces cuando comprendí que esta revelación tenía implicaciones enormes para múltiples disciplinas científicas», afirmó Vopson en una declaración de la universidad.
La simetría como evidencia
Uno de los elementos que más intrigó al investigador fue la constante presencia de simetría en la naturaleza: desde la forma de los copos de nieve hasta la estructura del rostro humano, pasando por patrones biológicos y físicos.
Según Vopson, esta tendencia natural hacia la simetría se explicaría porque representa un estado de mínima entropía informacional. En palabras simples, es la forma más eficiente de organizar los datos del universo.
“Este proceso de eliminación de exceso de información se asemeja a cómo una computadora borra o comprime datos para ahorrar espacio y energía”, explicó el científico. “Es otra pista que sugiere que vivimos dentro de una simulación controlada por un sistema superior”.
Un experimento para probar la simulación
La idea de que el universo es una simulación ha sido respaldada en el pasado por figuras como Elon Musk y se ha popularizado en la cultura popular, pero Vopson busca llevarla al terreno experimental.
En 2024, el físico lanzó una campaña de financiación colectiva para realizar un experimento que, asegura, podría poner a prueba su teoría. El plan consiste en utilizar colisiones entre partículas y antipartículas para detectar la “información interna” de cada una.
“El experimento consiste en borrar esa información y medir lo que queda”, explicó. “Si la información tiene masa y es detectable, podríamos demostrar que los elementos fundamentales del universo contienen código, como lo haría un programa de ordenador”.
Aunque la campaña de recaudación no logró su meta de £185,000, Vopson mantiene la esperanza de llevar adelante la prueba, convencido de que podría confirmar la existencia de una quinta forma de materia y revolucionar las bases de la física moderna.
Una idea inquietante pero fascinante
La hipótesis de la simulación no es nueva, pero lo que diferencia a Vopson es su intento de validarla desde la ciencia experimental. Si sus teorías resultan correctas, cambiaría por completo nuestra comprensión de la realidad, la materia, el tiempo… y de nosotros mismos.
“No se trata solo de una posibilidad filosófica”, dijo el investigador. “Si la información es un componente clave de todo en el universo, tendría sentido pensar que una enorme computadora está detrás de todo, y que lo que percibimos como realidad es solo una interfaz.”
Mientras tanto, la comunidad científica observa con cautela. Algunos ven en las ideas de Vopson una posibilidad revolucionaria; otros, un planteamiento especulativo aún sin suficiente base empírica. Pero si su experimento llega a concretarse y los resultados lo respaldan, estaríamos ante uno de los descubrimientos más trascendentales de la historia humana.
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